CAF anuncia un compromiso histórico de USD 18.000 millones para impulsar el transporte sostenible
En el marco del lanzamiento de la Década del Transporte Sostenible de las Naciones Unidas, CAF –banco de desarrollo de América Latina y el Caribe– anunció un compromiso financiero sin precedentes de USD 18.000 millones hasta 2025 para el sector transporte en la región. Esta inversión, que representa un aumento del 25% respecto a la década anterior, busca acelerar la transformación del sector con foco en productividad, integración regional, inclusión social y sostenibilidad ambiental.
El transporte, junto con su infraestructura y servicios, es un pilar estratégico para el desarrollo sostenible y la prosperidad en América Latina y el Caribe. En un contexto de crecientes desafíos —descarbonización, resiliencia climática, equidad social y transformación digital— la región requiere una coordinación inédita entre los sectores público y privado para modernizar y fortalecer sus sistemas de movilidad.
“Con esta inversión histórica impulsaremos la transformación del sector transporte en América Latina y ponerlo a la altura de las regiones más avanzadas, con altos estándares de sostenibilidad ambiental. El nuevo compromiso financiero de CAF reafirma nuestro liderazgo y alinea nuestro portafolio con las metas climáticas y de desarrollo sostenible de la región”, afirmó Sergio Díaz-Granados, presidente ejecutivo de CAF.
Durante la última década, CAF se consolidó como un aliado clave del sector, con aprobaciones por USD 14.400 millones en proyectos de movilidad urbana, rehabilitación vial, acceso rural y conectividad regional.
Cuatro pilares estratégicos para la inversión
• Movilidad urbana sostenible y segura
Impulso al transporte público masivo y de calidad, electrificación de flotas, modos activos como caminata y bicicleta, y mejoras en seguridad vial para construir ciudades más habitables, equitativas y con menor congestión.
• Logística y conectividad regional baja en carbono
Modernización de corredores viales, ferroviarios, portuarios y fluviales para reducir costos logísticos, fortalecer el comercio intrarregional y global, y promover transiciones modales más eficientes energéticamente, como el ferrocarril.
• Resiliencia climática de infraestructuras
Diseño y adaptación de infraestructuras para afrontar eventos climáticos extremos, incorporando criterios de reducción de vulnerabilidad y soluciones basadas en la naturaleza para proteger inversiones y comunidades expuestas.
• Digitalización y fortalecimiento institucional
Integración de tecnologías como inteligencia artificial, IoT y sistemas inteligentes de gestión para optimizar operaciones, mejorar la seguridad y elevar la experiencia del usuario. Además, apoyo a la modernización de la gestión pública y la gobernanza del sector.
Un motor para la productividad, la integración y la sostenibilidad
El transporte moderno y articulado es un vector clave de competitividad: reduce costos logísticos, habilita acceso a mercados, dinamiza cadenas productivas y atrae inversiones, generando empleo de calidad. También es fundamental para la cohesión social y territorial, permitiendo que más del 80% de la población urbana —así como habitantes de zonas rurales y aisladas— accedan a educación, salud y oportunidades laborales, contribuyendo a reducir brechas históricas.
El reto ambiental es central. En América Latina y el Caribe, el sector transporte es responsable del 31% de las emisiones de CO₂ del sector energía. La transición verde exige medidas decididas: reducción de emisiones, energías limpias, renovación de flotas y planificación del transporte integrada al territorio, preservando los ecosistemas.
