El Gobierno vuelve a prorrogar la licitación de las represas del Comahue y suma tensión con las provincias

En una nueva postergación del proceso privatizador, el Gobierno nacional decidió extender una vez más el llamado a licitación para la venta del paquete accionario mayoritario de las represas del Comahue. Se trata de la primera privatización de peso que impulsa la gestión de Javier Milei desde su asunción, pero que viene demorada desde hace más de un año.
La medida fue oficializada este jueves mediante el Decreto 263/2025, firmado por el propio presidente, en el que se establece un nuevo plazo de 15 días, contados desde la fecha de publicación, para lanzar el Concurso Público Nacional e Internacional que permitirá avanzar con la venta de las acciones de cuatro represas clave del sistema hidroeléctrico argentino: Alicurá, El Chocón, Cerros Colorados y Piedra del Águila. El plazo venció este 10 de abril, por lo cual se procedió a la extensión.
Según se argumenta en los considerandos del decreto, la prórroga responde a un pedido conjunto de los gobernadores de Neuquén, Rolando Figueroa, y Río Negro, Alberto Weretilneck, quienes solicitaron más tiempo para que los equipos técnicos provinciales puedan evaluar los alcances del proceso y presentar observaciones.
“Corresponde fijar un plazo de quince días, contados a partir de la publicación del presente, con el fin de que las mencionadas provincias y todos los organismos interjurisdiccionales involucrados tomen la debida participación en el proceso”, señala la norma.
Las concesiones de estas centrales hidroeléctricas, que fueron privatizadas en los años ’90, vencieron en 2023. La gestión anterior, encabezada por Sergio Massa, había decidido extenderlas un año más, en línea con lo previsto en los contratos. Sin embargo, el gobierno de Milei adoptó un enfoque distinto.
En un primer momento, el entonces secretario de Energía Eduardo Rodríguez Chirillo propuso crear una empresa por cada represa para transferir temporalmente su operación a ENARSA y NASA por 180 días, mientras se organizaba una nueva licitación. Pero ese plan quedó trunco. En noviembre de 2024, el Decreto 895/2024 volvió a modificar la estrategia: se dejó afuera a ENARSA y se incorporó a la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, en conjunto con la Secretaría de Energía, como responsables del proceso.
Uno de los puntos de mayor fricción sigue siendo la disputa por la participación provincial. Tanto Neuquén como Río Negro reclaman un rol activo en la licitación, alegando que los recursos hídricos son de dominio provincial. Esta postura fue desestimada por Rodríguez Chirillo cuando defendió la Ley de Bases en el Congreso, donde sostuvo la posición centralista del gobierno nacional sobre los activos estratégicos.
Mientras tanto, los actuales concesionarios —AES, Enel, Aconcagua y Central Puerto— continúan operando las represas y aguardan definiciones para competir en la próxima compulsa.
La prórroga suma una nueva incertidumbre a un proceso que debería ser clave en el plan de desregulación y achicamiento del Estado que promueve el Gobierno, pero que hasta el momento ha encontrado más trabas que avances concretos.