Bazaul: “La transición energética en el transporte ya no es un proyecto a futuro: es una realidad que estamos implementando”

Bazaul

El uso de gas natural comprimido (GNC) como alternativa para el transporte de cargas pesadas viene ganando terreno en la Argentina, en un contexto donde las empresas buscan reducir costos operativos y, al mismo tiempo, avanzar en la disminución de su huella ambiental. En este marco, Juan Manuel Bazaul, titular de JBS, en dialogo con Futuro Sustentable destacó los avances logrados en la implementación de una flota de camiones propulsados a GNC, una tecnología que se consolida como una opción viable frente al diésel tradicional.

Según explicó Bazaul, el principal beneficio radica en la reducción significativa de emisiones contaminantes, en línea con los objetivos de descarbonización del sector logístico. El uso de GNC permite bajar en más de un 20% las emisiones de dióxido de carbono, además de disminuir en un 90% los niveles de material particulado y otros contaminantes locales que afectan la calidad del aire en las ciudades.

Otro aspecto relevante es el económico: el gas natural comprimido ofrece un costo por kilómetro recorrido hasta un 40% menor respecto al gasoil, lo que se traduce en una mejora sustancial en la competitividad del transporte. “No solo estamos invirtiendo en un modelo más limpio, sino también más eficiente en términos de operación y mantenimiento”, sostuvo Bazaul, al remarcar que la vida útil de los motores a GNC suele extenderse gracias a una combustión más limpia y menos agresiva.

En términos de infraestructura, Bazaul destacó que la Argentina cuenta con una de las redes más amplias de estaciones de carga de GNC en el mundo, lo que facilita la expansión de esta tecnología al transporte de cargas pesadas. Además, mencionó que se vienen realizando pruebas con biometano, un combustible renovable que puede inyectarse en la red actual, abriendo la puerta a una logística aún más sustentable.

“La transición energética en el transporte ya no es un proyecto a futuro: es una realidad que estamos implementando y que requiere seguir trabajando en conjunto con los distintos actores del sector. De hecho, la industria energética está solicitando este tipo de servicios no solo pensando en costos sino en mejorar su gestión en políticas de descarbonización», concluyó Bazaul.