COP30: Lula llamó a los líderes globales a asumir metas claras para reducir emisiones

El presidente de Brasil, Luiz Ignácio Lula da Silva, presentó ayer miércoles 19 de noviembre en Belém un balance de las negociaciones de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30). En su intervención, Lula reforzó la necesidad de que los líderes mundiales asuman compromisos concretos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y avancen hacia una transición energética justa y global.

“Todos deben comprender su responsabilidad. Por eso presentamos la Hoja de Ruta. Debemos demostrar a la sociedad que hablamos en serio (…) Debemos reducir las emisiones de gases de efecto invernadero”, afirmó el mandatario brasileño. La Hoja de Ruta, presentada por Brasil en las negociaciones, propone planes de acción y lineamientos para disminuir progresivamente el uso de combustibles fósiles a escala global.

Lula destacó el desafío y al mismo tiempo el valor simbólico de llevar una cumbre de esta magnitud al corazón de la Amazonía. “Era muy importante mostrar la Amazonía tal como es y grabarla en la mente de las personas de todo el mundo”, señaló. Con tono reflexivo, añadió que el evento permitió visibilizar la riqueza cultural, ambiental y humana de la región: “Estoy seguro de que ahora la gente sabe que no solo existe la ciudad de Belén donde nació Jesús, sino también Belém do Pará, el Belém del pueblo brasileño”.

El Presidente sostuvo que esta edición puede considerarse “la primera COP de los Pueblos”, debido a su amplia participación social. “Personas de todo el planeta vinieron aquí a expresarse”, afirmó, subrayando la presencia récord de 3.500 representantes de pueblos indígenas, así como la fuerte participación de mujeres, organizaciones sociales, jóvenes y sectores privados.

Negociaciones y avances clave

El presidente de la Conferencia, André Corrêa do Lago, realizó un resumen de las discusiones del día, destacando los avances en temas críticos como adaptación, financiamiento climático y la propia Hoja de Ruta. “Ha sido un día muy productivo (…) analizamos las amplias implicaciones económicas de la COP30 y el creciente reconocimiento de los impactos de la acción climática”, indicó.

Uno de los anuncios más relevantes llegó de la mano de la ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático, Marina Silva, quien celebró la contribución anunciada por Alemania al Fondo para los Bosques Tropicales para Siempre (TFFF). La ayuda asciende a mil millones de euros y marca un fuerte respaldo internacional a este mecanismo financiero impulsado por Brasil.

El TFFF propone un nuevo paradigma: los países que conservan bosques tropicales reciben compensaciones a través de un fondo global de inversión, mientras que los inversores recuperan sus aportes con rendimientos competitivos. El objetivo es convertir la conservación forestal en un motor económico y social, haciendo más rentable proteger que deforestar.

Una COP plural, inclusiva y con enfoque social

Lula subrayó que la COP30 marcó un antes y un después en términos de participación:

• La presencia indígena alcanzó un récord histórico.

• La agenda de género tuvo un rol central: “Las mujeres deben ser tratadas con respeto en su plena participación. No son ciudadanas de segunda clase”, enfatizó.

• Se impulsó una mirada más profunda sobre la innovación, la cultura y la dimensión humana de la acción climática.

En su discurso, el Presidente brasileño marcó una dirección clara para el futuro:

• Cuidar el clima es un compromiso con la supervivencia del planeta, dijo, y remarcó que preservar los bosques y garantizar agua limpia son aspectos fundamentales y urgentes.

• Insistió en que los países desarrollados deben apoyar financieramente y con transferencia tecnológica a los países del sur global: “No se trata solo de recursos, sino de ayudar a dar un salto cualitativo”.

• Destacó la diversidad energética de Brasil —con 87% de su electricidad de fuentes limpias y un desarrollo significativo de biocombustibles— como ejemplo del camino posible hacia la descarbonización.

De cara al cierre de la conferencia, Lula se mostró optimista sobre los resultados que podrá alcanzar el equipo negociador brasileño. Recordó que en las COP “nada se impone: todo debe lograrse mediante el consenso”, respetando la soberanía de cada país y buscando acuerdos que permitan avanzar colectivamente en la acción climática.

“Si es posible, construyámoslo juntos”, concluyó.

Con esta intervención, Lula reforzó la ambición climática de Brasil y consolidó el tono social, inclusivo y amazónico que definió a la COP30 como una cita histórica para el multilateralismo ambiental.