Milei avanza con su primera gran privatización y firmas locales marcan el rumbo en el Comahue

Represas

La licitación para adjudicar por 30 años la operación de cuatro centrales hidroeléctricas estratégicas del Comahue —la primera privatización de activos relevantes bajo la gestión de Javier Milei— entró en su etapa final con la apertura de ofertas económicas. Tres de las represas ya tienen ganador definido, mientras que Cerros Colorados deberá pasar por una instancia de mejora de propuestas.

El proceso dejó un dato político y empresarial de peso: el avance de grupos nacionales por sobre las multinacionales, en un sector históricamente dominado por capitales extranjeros. También marcó la salida de AES (Estados Unidos) y ENEL (Italia), pese a la cercanía del Gobierno con ambos países.

Alicurá: los Neuss desplazan a AES con una oferta contundente

El grupo Edison Inversiones —integrado por los hermanos Neuss, los dueños de Newsan y el fondo Inverlat— se quedó con Alicurá, una central clave de 1.050 MW. Para ello, ofreció 162 millones de dólares, superando por 30 millones la propuesta de la norteamericana AES, que deberá abandonar la operación tras más de tres décadas al frente del complejo.

El holding liderado por los Neuss viene de un proceso acelerado de expansión, con múltiples adquisiciones en el sector energético.

El Chocón: MSU desplaza a ENEL y suma un activo estratégico

La segunda gran pulseada fue por El Chocón, una represa emblemática del sistema eléctrico argentino, con 1.418 MW de potencia. La adjudicación quedó en manos de BML Inversora, del empresario Manuel Santos Uribelarrea, tras ofertar 235 millones de dólares.
La italiana ENEL, actual concesionaria con contrato vencido, quedó 50 millones por debajo. Con este resultado, ENEL —que aún mantiene un 23% de participación estatal en su capital— se retira de casi todo el negocio eléctrico en Argentina, conservando únicamente Edesur.

Piedra del Águila: Central Puerto retiene su mayor activo

Sin sorpresas, Central Puerto renovó su concesión sobre Piedra del Águila, la mayor central en disputa, con 1.440 MW de potencia instalada. La empresa, controlada por Guillermo Reca, Carlos Miguens y la familia Escassany, presentó una oferta de 245 millones de dólares, la más alta entre los oferentes.

Cerros Colorados: definición abierta

La única represa cuya adjudicación aún no se definió es Cerros Colorados (472 MW), operada hasta hoy por Orazul, afectada por problemas financieros.
Si bien BML Inversora presentó la oferta más alta (41 millones de dólares), la propuesta de Edison Inversiones quedó a menos de un 10% de diferencia. Según los pliegos, ambas compañías deberán realizar una mejora para determinar quién se quedará con el activo.
De este modo, la familia Neuss o el grupo Uribelarrea terminarán controlando dos de las cuatro centrales.

Otros jugadores que quedaron atrás

  • Futaleufú (Aluar), asociada a Genneia, quedó última con ofertas simbólicas de 1 dólar en tres represas y fue superada en El Chocón por MSU.

  • Pampa Energía, de Marcelo Mindlin, tampoco logró adjudicarse ninguna central: presentó propuestas muy por debajo en dos casos y no alcanzó a competir en Piedra del Águila.

Un ingreso de divisas que genera debate

El Gobierno celebró el resultado del proceso, que aportará 685 millones de dólares a las golpeadas reservas del Banco Central. Sin embargo, especialistas del sector consideran que la cifra es “modesta”, si se toma en cuenta que se trata de centrales que en conjunto aportan alrededor del 7% de la energía anual consumida en Argentina.

Más allá de la discusión económica, el resultado de la licitación redefine el mapa energético: los grupos nacionales se reposicionan, las multinacionales retroceden y el Gobierno avanza en su agenda de privatizaciones con señales políticas y de mercado que seguirán generando análisis.