Una empresa sanjuanina revoluciona el reciclaje de neumáticos mineros con tecnología limpia

Indram

En medio del auge minero y los desafíos ambientales que esto conlleva, una empresa sanjuanina está marcando un nuevo rumbo en materia de reciclaje industrial sostenible. Se trata de Indram Tecnología Limpia, que desde su planta ubicada en el Parque Industrial Tecnológico Ambiental Regional (PITAR), en Rivadavia, ha logrado instalar la planta más tecnológica del país para el tratamiento de neumáticos fuera de uso (NFU), especialmente los utilizados por la minería.

En una provincia donde la minería representa uno de los pilares económicos, la generación de residuos industriales —como los enormes neumáticos utilizados por camiones y maquinaria pesada— plantea un problema ambiental creciente. Frente a esto, Indram ofrece una solución innovadora: un sistema de reciclaje 100% mecánico, sin incineración, sin químicos y sin emisiones contaminantes.

“Buscamos ser un agente de cambio positivo, creando una cadena de valor regional con impacto ambiental cero”, explicó Gisella Heredia, coordinadora de desarrollo institucional y comercial de la empresa, en diálogo con DIARIO HUARPE.

Tecnología limpia y economía circular

El proceso desarrollado por Indram se basa en corte y trituración mecánica de neumáticos, lo que permite obtener granulado de caucho reutilizable. A diferencia de los métodos tradicionales, como la quema o la fundición —altamente contaminantes—, el sistema de Indram no genera residuos peligrosos ni emisiones a la atmósfera.

Este enfoque permite reinsertar el caucho en diversas industrias, desde la construcción de suelos deportivos hasta mezclas asfálticas, reduciendo la necesidad de materia prima virgen y cerrando el ciclo de vida del producto con un claro enfoque de economía circular.

Un modelo que trasciende San Juan

El impacto del trabajo de Indram no se limita a San Juan. Por su nivel de tecnología y compromiso ambiental, la planta ya se posiciona como referente nacional en reciclaje de neumáticos mineros, y podría ser modelo para otras provincias con fuerte actividad extractiva como Catamarca, Salta o Santa Cruz.

Además, el desarrollo de esta industria verde abre oportunidades de empleo local, innovación tecnológica y conciencia ambiental, articulando producción con sostenibilidad de una manera concreta y replicable.

En tiempos donde la crisis climática exige acciones urgentes y transformadoras, ejemplos como el de Indram demuestran que es posible compatibilizar desarrollo industrial con responsabilidad ambiental. Con decisión empresarial, apoyo público y conciencia ciudadana, la transición hacia un modelo productivo más limpio y justo ya no es solo una aspiración, sino una realidad que empieza a rodar —literalmente— desde San Juan.