Día Mundial del Ambiente: FARN advierte sobre retrocesos ambientales en Argentina y exige acción estatal

Farna12

En el marco del Día Mundial del Ambiente, la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) lanzó un fuerte llamado de atención ante la creciente crisis ecológica global y el debilitamiento de las políticas ambientales en Argentina. La organización advierte que los impactos del cambio climático —como inundaciones, sequías e incendios— se intensifican, al mismo tiempo que se agravan las desigualdades sociales. Frente a este escenario, FARN subraya la urgencia de que los Estados adopten medidas concretas de adaptación y mitigación ambiental.

Según el informe difundido por la entidad, Argentina ha experimentado un serio retroceso en materia ambiental en los últimos años. Entre las principales señales de alarma se destaca la eliminación del Ministerio de Ambiente, recortes presupuestarios de entre el 34% y el 81% en áreas clave y una marcada subejecución de fondos destinados a enfrentar problemáticas urgentes como los incendios forestales, la pérdida de bosques nativos y la adaptación al cambio climático.

Las consecuencias de estas decisiones ya son visibles. Solo en los primeros meses de 2025, los incendios forestales consumieron 287.000 hectáreas en la Patagonia y Corrientes. En marzo, las inundaciones en Bahía Blanca provocaron 16 muertes y la destrucción de zonas urbanas enteras. A mediados de mayo, nuevas lluvias intensas causaron más inundaciones y daños materiales en el norte de la provincia de Buenos Aires. Para FARN, estos eventos —cada vez más frecuentes y severos— evidencian la falta de planificación y de inversión estatal en medidas de prevención y adaptación climática.

“Las pérdidas humanas, económicas y sociales vinculadas al cambio climático son, en muchos casos, evitables”, señalaron desde la Fundación. Por eso, instan a recuperar el rol del Estado como garante del derecho a un ambiente sano, y a implementar políticas públicas con una mirada de justicia socioambiental.

La organización remarca que responder a los desafíos ecológicos y climáticos del presente no solo requiere voluntad política, sino también un enfoque integral que priorice a las poblaciones más vulnerables, la equidad territorial y la sostenibilidad a largo plazo.