Los océanos en el centro del debate global: arranca la 3ª Conferencia de la ONU en Niza

Niza

Del 9 al 13 de junio, la ciudad francesa de Niza será sede de un evento crucial para el futuro de los océanos y la gobernanza ambiental global. Organizada por Costa Rica y Francia, la Tercera Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos reunirá a más de 10.000 participantes, incluidos jefes de Estado, diplomáticos, científicos y representantes de la sociedad civil.

La cumbre busca acelerar la acción internacional para mejorar la salud de los océanos, aumentar la financiación para su protección, promover el desarrollo sostenible y profundizar su integración en la agenda climática global. Se espera la presencia destacada de los presidentes Emmanuel Macron y Luiz Inácio Lula da Silva, en un intento por catalizar un nuevo liderazgo político en defensa de los ecosistemas marinos.

Uno de los resultados más esperados será la adopción de la Declaración Política de Niza, un documento que aspira a reforzar el compromiso voluntario de los países en la protección oceánica, integrándola de forma más efectiva en sus marcos nacionales e internacionales.

Entre los temas prioritarios de esta edición se destacan:

  • Nuevos compromisos vinculados al comercio, el transporte marítimo, el turismo y los planes climáticos nacionales (NDC).

  • Impulso al Tratado de Alta Mar, buscando ampliar el número de países firmantes de este acuerdo clave para proteger las aguas internacionales.

  • Apoyo al Tratado Global sobre Plásticos, cuyas negociaciones avanzarán en agosto en Suiza.

  • Protagonismo de los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PEID), quienes lideran propuestas sobre resiliencia marina, cambio climático y aumento del nivel del mar.

La conferencia se celebra en un contexto estratégico, a sólo seis meses de la próxima Cumbre del Clima (COP) y de las conversaciones preparatorias en Bonn, convirtiéndose en un punto de inflexión para definir prioridades sobre clima oceánico, biodiversidad marina y cooperación multilateral.

Con los océanos bajo presión por la contaminación, la sobrepesca y el calentamiento global, la cumbre de Niza se perfila como una oportunidad única para traducir la urgencia científica en compromisos políticos concretos.